sábado, 26 de julio de 2014

Turismos clásicos II

Vamos con la segunda parte de este apartado dedicado a los automóviles más comunes que podían verse por nuestra geografía en los años 70, 80 y 90 del pasado siglo.

Comenzamos por el Seat 131 (Fiat 131 Mirafiori) de Drummer, Se trata de una berlina de cuatro puertas que fue usado tanto como coche particular como de servicio público. Fue presentado en el salón del automóvil de Turín de 1974. Se fabricó desde 1974 a 1983 (En España del 75 al 82). El Seat 131 era un coche de la gama media/alta que se situaba por debajo del SEAT 132. Tomó el relevo de los Seat 1430 y 124 (aunque compartieron el mercado hasta 1980). A lo largo de sus 9 años de producción hubo diversas versiones, todas ellas se caracterizaban por sus buenos acabados y unos motores fiables y potentes heredados directamente del Seat 124; con él comparte la mayoría de los aspectos mecánicos y una carrocería actualizada pero de un concepto muy similar.
En España se comercializaron las tres series presentadas en el Fiat 131 con leves modificaciones. Lo más probable es que el modelo reproducido por Drummer se corresponda con el SEAT 131 E 1600 (JD, JB), versión más lujosa hasta la aparición del CLX; contaba con motor biárbol de levas de 1.592 cm³ que rendía 95 cv (DIN) de potencia junto a la caja de cambios de 5 velocidades. Exteriormente se diferencia por sus dobles ópticas circulares con lámparas convencionales integradas en la calandra, llantas de la misma medida con neumáticos 165 y diseño específico con tapabujes negros, molduras laterales, junquillo del parabrisas cromado y limpiaparabrisas negro, perfiles de goma en los parachoques. Interiormente, cuadro de mandos con velocímetro reglado hasta 200 k/h y con reloj de cuarzo, cambio de cinco velocidades con palanca vertical corta y consola central, y puede montar de serie u opcionalmente en la versión lujo: columna de dirección regulable en altura, el mismo volante de dos brazos pero con mayor acolchado en la zona de accionamiento del claxon, luneta térmica trasera y warning, asientos más anchos en terciopelo, paneles de puertas con cromados con apoyabrazos largos y tiradores más robustos , luces de cortesía traseras, reloj de cuarzo integrado en el cuadro de instrumentos y mandos de calefacción iluminados.
Centrándonos ya en la miniatura, decir que está en la línea de las últimas producciones de la marca Brekina con un aspecto general muy bueno con gran cantidad de finos detalles reproducidos, como la rejilla del radiador, las finas líneas de la carrocería, la moldura decorativa negra, el tapón del combustible, etc. El interior tiene reproducida la tapicería en marrón y el salpicadero y el volante en negro. Los dobles faros delanteros en plástico transparente, los pilotos traseros en transparente rojo con la luces de marcha atrás pintadas en plata y los intermitentes de las aletas delanteras en naranja. Los parargolpes en pieza aparte “cromados” (pintura plata) con la banda de goma en color negro y las luces antiniebla sobre el delantero. El modelo se remata con el espejo retrovisor y los limpiaparabrisas en negro. Las ruedas con aspecto de goma pero con unos tapacubos demasiado “brillantes”




Fiat 131 Mirafiori ref. 22600 de Drummer

¿Qué decir del Citroën 2 CV? Coche mítico donde los haya.
El Citroën 2CV es sin duda un bastión importante en la historia del automóvil. Su difusión por todas partes del mundo le ha convertido en el hito del automóvil económico por antonomasia. Su cariñosa y "fea" imagen se ha divulgado y extendido asociada al mito juvenil, escaso de recursos, que lo convirtió en una visión "hippie" del automóvil. El mundo rural lo asoció a su trabajo duro en el campo y la ciudad lo recibió, principalmente con la versión furgoneta, para efectuar los múltiples recados de puerta a puerta para repartir los paquetes más dispares. En el mundo del transporte ligero la aparición de esta pequeña furgoneta que se extendió rápidamente por todos los ámbitos barrió prácticamente los diversos vehículos existentes, motocarros, camionetas "sui generis", e incluso los últimos residuos del transporte de "sangre" que había perdurado hasta entonces. Presentado en el salón de París de 1948, su historia data en realidad de 1936 con el Proyecto TPV (très petit voiture) suspendido a causa de la Segunda Guerra Mundial. En España, la historia del 2 CV se pone en marcha con la fábrica de Citroën Hispania de Vigo en 1958 donde primeramente se fabricó la furgoneta AZU derivada de éste y fue producido desde 1959 hasta el año 1980.
La miniatura de Wiking, para mí la mejor, está realizada en plástico azul brillante la carrocería, en plástico color gris claro el chásis y los paragolpes. El característico techo de lona con apertura de lata de sardinas está reproducido en plástico de color gris oscuro acabado mate. Los neumáticos son de plástico. La única tampografía que lleva es la rejilla del radiador y el cristal de los faros en color gris plata. Echo de menos un poco más de detalle en los pilotos traseros que podrían estar reproducidos en plástico transparente rojo o en su defecto pintados y los indicadores de dirección sobre la ventana de la puerta trasera así como un mayor tamaño de las llantas de chapa estampada pintada. Lo más probabble y dado que los chevrones de la marca aparecen sobre el capot de cinco nervios es que el modelo reproducido por Wiking pertenezca al modelo AZAM de 1966.
El Citroën 2 CV también ha sido reproducido en H0 por Eko (Toyeko), Herpa (versión con faros rectangulares y versión Charleston), por Shuco (versión con faros rectangulares) y por Norev/Atlas (versión de 1949 y versión Sahara de 1958).





Citroën 2 CV ref. 809 01 20 de Wiking

No hay comentarios:

Publicar un comentario