Vamos con la segunda parte de este apartado dedicado a los
automóviles más comunes que podían verse por nuestra geografía en los años 70,
80 y 90 del pasado siglo.
Comenzamos
por el Seat 131 (Fiat 131 Mirafiori) de Drummer, Se trata de una berlina de
cuatro puertas que fue usado tanto como coche particular como de servicio
público. Fue presentado en el salón del automóvil de Turín de 1974. Se fabricó
desde 1974 a 1983 (En España del 75 al 82). El Seat 131
era un coche de la gama media/alta que se situaba por debajo del SEAT 132.
Tomó el relevo de los Seat 1430 y 124 (aunque compartieron el mercado hasta
1980). A lo largo de sus 9 años de producción hubo diversas versiones, todas
ellas se caracterizaban por sus buenos acabados y unos motores fiables y
potentes heredados directamente del Seat 124;
con él comparte la mayoría de los aspectos mecánicos y una carrocería
actualizada pero de un concepto muy similar.
En
España se comercializaron las tres series presentadas en el Fiat 131 con leves
modificaciones. Lo más probable es que el modelo reproducido por Drummer se
corresponda con el SEAT 131 E 1600 (JD, JB), versión más lujosa hasta la
aparición del CLX; contaba con motor biárbol de levas de 1.592 cm³ que rendía
95 cv (DIN) de potencia junto a la caja de cambios de 5 velocidades.
Exteriormente se diferencia por sus dobles ópticas circulares con lámparas
convencionales integradas en la calandra, llantas de la misma medida con
neumáticos 165 y diseño específico con tapabujes negros, molduras laterales,
junquillo del parabrisas cromado y limpiaparabrisas negro, perfiles de goma en
los parachoques. Interiormente, cuadro de mandos con velocímetro reglado hasta
200 k/h y con reloj de cuarzo, cambio de cinco velocidades con palanca vertical
corta y consola central, y puede montar de serie u opcionalmente en la versión
lujo: columna de dirección regulable en altura, el mismo volante de dos brazos
pero con mayor acolchado en la zona de accionamiento del claxon, luneta térmica
trasera y warning, asientos más anchos en terciopelo, paneles de puertas con
cromados con apoyabrazos largos y tiradores más robustos , luces de cortesía
traseras, reloj de cuarzo integrado en el cuadro de instrumentos y mandos de
calefacción iluminados.
Centrándonos
ya en la miniatura, decir que está en la línea de las últimas producciones de
la marca Brekina con un aspecto general muy bueno con gran cantidad de finos
detalles reproducidos, como la rejilla del radiador, las finas líneas de la
carrocería, la moldura decorativa negra, el tapón del combustible, etc. El
interior tiene reproducida la tapicería en marrón y el salpicadero y el volante
en negro. Los dobles faros delanteros en plástico transparente, los pilotos
traseros en transparente rojo con la luces de marcha atrás pintadas en plata y
los intermitentes de las aletas delanteras en naranja. Los parargolpes en pieza
aparte “cromados” (pintura plata) con la banda de goma en color negro y las
luces antiniebla sobre el delantero. El modelo se remata con el espejo retrovisor
y los limpiaparabrisas en negro. Las ruedas con aspecto de goma pero con unos
tapacubos demasiado “brillantes”
Fiat
131 Mirafiori ref. 22600 de Drummer
¿Qué
decir del Citroën 2 CV? Coche mítico donde los haya.
El
Citroën 2CV es sin duda un bastión importante en la historia del automóvil. Su difusión por
todas partes del mundo le ha convertido en el hito del automóvil económico por
antonomasia. Su cariñosa y "fea" imagen se ha divulgado y extendido
asociada al mito juvenil, escaso de recursos, que lo convirtió en una visión
"hippie"
del automóvil. El mundo rural lo asoció a su trabajo duro en el campo y la
ciudad lo recibió, principalmente con la versión furgoneta, para efectuar los
múltiples recados de puerta a puerta para repartir los paquetes más dispares.
En el mundo del transporte ligero la aparición de esta pequeña furgoneta que se
extendió rápidamente por todos los ámbitos barrió prácticamente los diversos
vehículos existentes, motocarros, camionetas "sui generis", e incluso los últimos
residuos del transporte de "sangre" que había perdurado hasta
entonces. Presentado en el salón de París de 1948, su historia data en realidad
de 1936 con el Proyecto TPV (très petit voiture) suspendido a causa de la
Segunda Guerra Mundial. En España, la historia del 2 CV se pone en marcha con
la fábrica de Citroën Hispania de Vigo en 1958 donde primeramente se fabricó la
furgoneta AZU derivada de éste y fue producido desde 1959 hasta el año 1980.
La
miniatura de Wiking, para mí la mejor, está realizada en plástico azul brillante
la carrocería, en plástico color gris claro el chásis y los paragolpes. El
característico techo de lona con apertura de lata de sardinas está reproducido
en plástico de color gris oscuro acabado mate. Los neumáticos son de plástico.
La única tampografía que lleva es la rejilla del radiador y el cristal de los
faros en color gris plata. Echo de menos un poco más de detalle en los pilotos
traseros que podrían estar reproducidos en plástico transparente rojo o en su
defecto pintados y los indicadores de dirección sobre la ventana de la puerta
trasera así como un mayor tamaño de las llantas de chapa estampada pintada. Lo
más probabble y dado que los chevrones de la marca aparecen sobre el capot de
cinco nervios es que el modelo reproducido por Wiking pertenezca al modelo AZAM
de 1966.
El
Citroën 2 CV también ha sido reproducido en H0 por Eko (Toyeko), Herpa (versión
con faros rectangulares y versión Charleston), por Shuco (versión con faros rectangulares) y por Norev/Atlas (versión de 1949 y versión Sahara de 1958).
Citroën
2 CV ref. 809 01 20 de Wiking